lunes, 3 de julio de 2017

Fragmentos de terror...FORMULA MATEMATICA


Las matemáticas aplicadas tienen muchas mas funciones que hacernos la vida imposible en la escuela...


FORMULA MATEMÁTICA 

Siempre fui muy buena en las matemáticas, más que buena, era un genio. De esas virtuosas que se dan rara vez. Eso me lo constataron desde que estudiaba la primaria y mis maestros se admiraban de mis capacidades en el ramo. Lo mismo pasó en la secundaria, en la preparatoria y en la universidad, donde estudié Matemáticas aplicadas. Después cursé una maestría y un doctorado.

   Fue en el doctorado donde conocí al que era mi esposo, el emérito profesor Abelardo; si bien, debo de reconocer que nunca me gustó su apariencia (y más que le daba un aire al revolucionario histórico Zapata), nuestros intelectos y metas en común si me fueron atractivos. Él trabajaba como director general de proyectos en el Instituto de Desarrollo Científico y Matemático, ahí me consiguió un puesto de asesora experimental muy bien pagado. Durante el día trabajamos desarrollando sus proyectos, y en la noche hacíamos el amor en todos los laboratorios.

   Su proyecto principal consistía en la teoría físico-cuántica de que en nuestro interior existían unas fuerzas inteligentes con vida propia, las cuales eran las encargadas de manejar nuestros órganos y funciones básicas de todo tipo. Sí, era algo descabellado e irreverente, pero Abelardo sostenía que en un plano de interdimensional, esos seres tenían la capacidad y función de hacer andar nuestros sistemas corpóreos, inclusive a nivel intracelular.